viernes, 16 de agosto de 2013

ACTITUDES Y BIENESTAR PSICOLOGICO


 


 ACTITUDES Y BIENESTAR PSICOLOGICO

Sabemos que tener problemas es intrínseco a la naturaleza humana. Lo importante es la actitud ante los problemas, ésta es lo que diferencia a una persona sana, equilibrada de otra que necesita ayuda psicológica.
Se puede tomar una actitud positiva o negativa.

Con una actitud positiva, se buscan soluciones a los problemas. Los que no tienen solución, se aceptan. Esa es una buena actitud. (No pelearnos porque el agua está mojada).
Y los que tienen solución, se analizan, viendo las posibles soluciones y eligiendo la más eficaz, y en caso de error, volver a elegir otra solución. Se trata de una actitud muy flexible y constructiva.

Con una actitud negativa, la persona se bloquea y añade más dificultades al problema inicial.
Detrás de esta actitud, se encuentran algunas creencias irracionales o distorsiones cognitivas que se han ido adquiriendo durante el desarrollo de la persona. Entre estas creencias se encuentran:
“No hago nada bien”.
“Soy un inútil”.
“Si esta persona no me quiere, es horrible”.
“Si no logro el éxito, es una catástrofe”.
“Seguro que voy a fracasar”.
“Todo me sale mal”.
“Nadie me quiere”,…
Estas creencias tienen que ver con el concepto de sí mismo, de los demás y del futuro.
Son ideas negativas arraigadas, apabullan a la persona, son muy destructivas, teniendo como resultado estados de ansiedad, bajo estado de ánimo, inseguridad en la vida, y dificultades en las relaciones personales.
Se trata de esquemas mentales que se van fraguando desde la infancia, a través de la educación recibida por los padres y de la interpretación que hace la persona de sus experiencias.
Estos esquemas llegan a convertirse en una “segunda piel”, de tal forma que la persona cree que siempre ha sido así, que es su forma de ser. Pero no es su auténtica forma de ser. Es un filtro mental a través del cual interpreta la realidad. Y condiciona bastante las siguientes experiencias.
Así si una persona está convencida de que este mundo es una selva, y la gente en general es malvada, su misma actitud desconfiada, le llevará a reafirmarse, pues a la buena gente ni la ve y a la mala: “ya te lo decía yo”.
Por otro lado, a otra persona, que le parece natural que la quieran y la respeten, lo más probable es que lo encontrará y no tendrá a su lado a personas abusadoras, que abusen de ella, y si las encuentra se apartará de ellas o no permitirá tal abuso.

Una característica de estos esquemas mentales es que son automáticos, podríamos decir que casi inconscientes. A veces ni nos damos cuenta de que estamos pensando de esa manera, bajo ese esquema mental.

Sé que a muchas personas les puede parecer que esto es muy bonito pero muy difícil.
Reconozco que no es fácil, pero se empieza por adquirir conciencia. Todo lo que no es consciente nos domina, tendiendo a repetir el mismo error una y otra vez. Tomar conciencia es el primer paso para iniciar otro camino, ver otras alternativas, cuestionarnos la forma en que vemos las cosas.

A través de la psicoterapia, nos hacemos conscientes de esas formas de pensar, esas actitudes, esa forma de ir por la vida. Con el trabajo psicológico, empezamos a cuestionar lo absurdo de esas creencias, lo dañinas que son y elaboramos otra forma de pensar más realista y constructiva, a nuestro favor y no en nuestra contra.
                                                                                         
                                                                                          Inocencia Castellano Herrera
                                                                                          Psicóloga
                                                                                          inocaster@gmail.com

No hay comentarios :

Publicar un comentario